Guía de compra: nueve coches por 30.000 euros

¡Elevamos la apuesta! Si hace unas pocas semanas hacíamos un repaso de las opciones más interesantes que ofrece el mercado en el rango de los 25.000 euros y esta vez ponemos el listón un poco más arriba y lo fijamos en los 30.000 euros.

Lo hacemos porque la variedad de carrocerías y tecnologías que te puedes encontrar con ese presupuesto es lo suficientemente interesante como para cubrir ya la mayor parte de las necesidades, tengas familia o no. ¿Vas a encontrar a tu futuro coche aquí?

Creemos que sí, porque hemos elegido a nueve modelos en los que vas a encontrar un poco de todo: desde berlinas hasta compactos, pasando por los (inevitables) SUV y hasta hay un familiar derivado de un comercial (el Ford Tourneo Conect).

Bajo el capó de nuestros candidatos también hay un interesante elenco de tecnologías, ya que se han dado cita desde motores de gasolina sin electrificación y etiqueta C, bloques diésel con bajos consumos, sistemas microhibríbridos, híbridos convencionales o incluso 100% eléctricos (como es el caso del Nissan Leaf).

Lo que está claro es que vas a tener que echar cuentas y estudiar cada propuesta para ver a qué equipamiento de serie optas con cada uno de los modelos que te ofrecemos.

Con algunos modelos sólo nos ha alcanzado para elegir los acabados más modestos o de acceso y eso supone muchos elementos de equipamiento que se quedan o en el limbo o en la lista de opciones, lo que eleva la factura si los quieres incluir (nos ha pasado con el Skoda Octavia, por ejemplo).

En los siguientes párrafos desmenuzamos cómo es cada uno de estos modelos que, por cierto, hemos ordenado alfabéticamente y no atendiendo a ningún otro tipo de criterio de calidad o preferencia por nuestra parte. Pasa de página si quieres saber a qué coche de 30.000 euros puedes comprar actualmente.

Renault Arkana E-TECH full hybrid: comodidad con estilo

guia compra 30000 euros

Lanzado en 2020, el Renault Arkana acaba de recibir un ligero restyling y estrena el nuevo logo, pequeños retoques estéticos y una gama de acabados simplificada (Evolution, Tecnho y Esprit Alpine).

Bajo el capó, no sufre apenas cambios (todos los motores llevan la etiqueta ECO de la DGT), así que nosotros nos hemos decidido por la variante full hybrid de 145 CV. Esta versión lleva un motor de 1,6 litros atmosférico de gasolina (94 CV), que cuenta con el apoyo de otro eléctrico (49 CV y alimentado por una pequeña batería de 1,2 kWh).

Lo bueno de esta versión es que destaca por unos consumos muy contenidos, que se sitúan por debajo de los 5,0 litros (homologa 4,8 l/100 km) si realizas una conducción normal. ¿La clave? Es capaz de utilizar durante mucho tiempo su motor eléctrico y, además, tiene un nuevo modo llamado E-SAVE, que garantiza que la batería no baje del 40 % de carga.

En marcha, destaca sobre todo por su buen hacer en todo tipo de superficies, ya sean perfectas autovías o carreteras más rotas. Su motor de 145 CV no es un tiro, pero la respuesta es suficiente para asegurarte adelantamientos o incorporaciones sin complicaciones.

Entre las cualidades prácticas de este francés hay que destacar su razonable habitabilidad interior, sobre todo, en las plazas delanteras, donde la marca del rombo se ha esforzado en cuidar los materiales (aún así, hay uso de plásticos duros en las zonas más bajas).

En la segunda fila no ofrece tanta amplitud, pero personas de 1,80 van a viajar bien (quien vaya sentada en el centro lo pasará peor).

En cuanto al maletero, el Arkana , con sus 480 litros en configuración de cinco plazas, 1.263 litros si abates los respaldos traseros, se sitúa en la media del segmento. Además, sus formas regulares te van a permitir aprovechar cada centímetro de la zona de carga.

El Arkana E-TECH full hybrid en su versión Techno viene de serie, entre otros, con la alerta de cambio involuntario de carril, asistente de frenada de emergencia y salida de parking, ayuda al arranque en pendiente, cámara de visión trasera, llantas de 17 pulgadas, modos de conducción, acceso y arranque sin llave, instrumentación digital, Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos y navegador.

Precio: 30.208 euros

Citroën C5 Aircross PureTech: diferente a todos

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Si te has fijado en este Citroën C5 Aircross es porque te atrae  lo distinto. Y es que los diseños de la marca francesa siempre han destacado por salirse de la norma: la estética polariza mucho, pero en un mercado tan saturado (y algo aburrido), el marcar un enfoque diferente puede ser la clave del éxito.

Este SUV ofrece en su gama mecánica motores diésel, de gasolina y un par de híbridos enchufables de 180 y 225 CV que, en nuestro caso, se salen del presupuesto, pero los Puretech de 130 CV entran perfectamente, e incluso puedes optar por el bien equipado acabado Plus.

Por dentro, tengo sentimientos encontrados con este C5: si bien la presentación es buena y el diseño sigue siendo atractivo, la calidad de los materiales no brilla al mismo nivel (hay plásticos duros en muchas zonas).

Lo bueno: en Citroën son expertos en crear modularidad y versatilidad interior y en el C5 Aircross no es una excepción: la segunda fila de asientos dispone de tres banquetas individuales con ajustes independientes y cada asiento se puede desplazar en longitud hasta en 15 cm (cada uno también se reclina).

También me gusta su maletero, que ofrece: 580 litros de capacidad mínimos que pasan a ser 720 litros si desplazamos hacia adelante toda la segunda fila de asientos. Si abates los asientos te encuentras con 1.630 litros, lo que no está nada mal.

En cuanto al motor, es un bloque de tres cilindros turbo y 1,2 litros de cilindrada que destaca por lo voluntarioso que es (no es rápido, pero es agradable y sabe cuidar de tu bolsillo con un consumo por debajo de los 7,0 l/100 km).

En cuanto al chasis, es ideal para hacer largos recorridos, con un esquema blando de suspensiones que busca mimar a los ocupantes. Puedes estar todo el día al volante que no llegarás cansado a tu destino. ¿Qué mejoraría? Lo tengo claro: el tacto del cambio manual.

El Puretech 130 con acabado Plus está bastante bien equipado e incluye de serie la alerta de riesgo de colisión con el sistema Active Safety Brake, los amortiguadores progresivos hidráulicos, cámara de visión trasera, faros EcoLED, cuadro de instrumentos digital de 30,5 cm, navegador, pantalla táctil de 25,4 cm, segunda fila ajustable en longitud y neumáticos 225/55 con llantas de 18 pulgadas.

Precio: 29.435 euros

Ford Tourneo Connect 2.0 EcoBlue: polifacético por naturaleza

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Entre los elegidos para esta guía de compra, buscábamos un vehículo eminentemente práctico. ¿Derivado de un comercial?  ¿Y por qué no? ¡Fuera prejuicios!

Este Ford Tourneo Connect va a hacer las delicias de todos aquellos conductores que quieran un vehículo para todo: hasta siete plazas, con posibilidad de tracción a las cuatro ruedas (cuesta 31.594 euros), interior amplio, maletero para cualquier necesidad, dos últimas filas extraíbles, motor diésel de bajo consumo y un tacto de conducción muy cercano al de un turismo.

Este dato te va a encantar: por primera vez, esta Tourneo Connect comparte la gran mayoría de elementos con la Volkswagen Caddy y eso es una garantía de fiabilidad y durabilidad.

Se puede elegir con dos variantes de carrocería (Tourneo Connect y Grand Tourneo Connect, de 4,5 y 4,85 metros respectivamente), ambas con hasta siete plazas. Nosotros nos hemos decidido por la corta para que pueda asociarse al acabado Titanium, que ofrece elementos de serie muy interesantes.

Por dentro, el diseño de salpicadero es como el de un turismo, salvo por pequeños detalles que recuerdan a un vehículo comercial, como es la abundante presencia de materiales duros (pensados para ser más resistentes) y los numerosos espacios de almacenamiento como el que está en la parte superior del salpicadero o los estantes en el techo.

Al volante, se conduce prácticamente igual que un turismo, con una sensación de conexión con el asfalto sorprendente para tratarse de este tipo de carrocerías. Su bloque diésel ofrece una aceleración correcta y lo mejor de él es que gasta menos de 6,0 litros (casi 1.000 km de autonomía).

A esta Tourneo la puedes equipar con muchos elementos interesantes (cámara trasera, cargador inalámbrico, navegador, acceso sin llave, asientos AGR, etc…), pero todos ellos son un extra. Con el acabado Titanium, de serie, ofrece el aviso de colisión frontal con frenado precolisión, sensores de parking, 3 puertos USB, pantalla de 8,25″ y llantas de 16 pulgadas, entre otros.

Precio: 29.507 euros

Kia Sportage Concept 1.6 T-GDi: el alumno aventajado

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El Kia Sportage es de esos SUV al que no puedes ponerle muchas pegas, porque, en general, es un producto bien planteado, que destaca por su buena realización, es amplio, presenta un diseño moderno y actual, y tiene una gama mecánica para todos los gustos y necesidades.

Quizá por eso, este coreano no sea precisamente una ganga, ya que con un presupuesto de 30.000 euros sólo puedas optar por el acabado y motor más modestos: el 1.6 T-GDi de 150 CV que ni siquiera incorpora el sistema de híbridación ligera de la variante MHEV (se va ya a 33.109 euros).

No es un coche grande, pero supera los 4,5 metros de longitud y eso ya le permite ofrecer un interior desahogado, tanto en la fila delantera, como en la trasera. Junto con el Citroën C5 y el Tourneo, es el que tiene el habitáculo más amplio de nuestros nueve elegidos.

Estamos, además, ante un SUV con una muy buena calidad percibida en cuando a materiales y diseño (aunque hay algún que otro inevitable plástico duro en las zonas más ocultas a la vista).

Con los 150 CV de su bloque de gasolina, te vas a poder mover de forma tranquila y con un confort de marcha elevado gracias a un esquema de suspensiones que busca, sobre todo, mimar al pasaje.

El motor está suficientemente bien aislado y gracias al turbo se comporta de forma razonablemente buena en la zona baja del cuentavueltas (no te esperes tampoco reacciones muy vivas). Toda la fuerza va a parar a las ruedas delanteras a través de una transmisión manual de seis marchas que funciona de forma correcta.

En cuanto a consumo, hay que decir que este es muy sensible al uso que hagas con el acelerador: si te desentiendes de una conducción relajada y avivas el ritmo, es posible que estés por encima de los 8,5 litros, pero si cuidas tus ímpetus rondarás los 7,0 litros (un dato más razonable). ¿Y el maletero? Va sobrado, con sus casi 600 litros, que son 1.780 con los respaldos abatidos.

El acabado Concept es el más modesto de la gama, pero no por ello deja de tener una dotación de serie interesante en la que destaca el asistente de luces de carretera, las llantas de 17″, la cámara de visión trasera, el reconocimiento de señales de tráfico, el aire acondicionado, el cuadro de instrumentos con una pequeña pantalla de 4,2 pulgadas, Android Auto y Apple CarPlay y la pantalla multimedia de 8 pulgadas.

Precio: 29.709 euros

Mazda CX-30 Exclusive e-Skyactiv G: marcado carácter urbanita

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Se sitúa a medio camino entre el CX-3 y el CX-5,  y, como en muchos Mazda, en su gama de motores prevalece la suavidad y el consumo contenido sobre las prestaciones.

Es lo que le sucede a nuestra versión elegida, que llega con un bloque de cuatro cilindros de 150 CV, sin turbo, que da lo mejor de sí cuando superas las 3.500 vueltas (por debajo de ese régimen, se muestra más modesto) y que siempre destaca por ser agradable y silencioso. Tampoco es muy tragón, ya que se conforma con un gasto por debajo de los 6,0 litros.

El Mazda CX-30 reivindica su carácter urbano con unas dimensiones contenidas (mide 4,39 metros de largo) que no le impiden ofrecer unas plazas delanteras amplias y confortables: el acceso es bueno y, aunque los asientos no van tan altos como en el CX-5, entrar y salir es fácil y cómodo.

Detrás, la cosa cambia: el paso de rueda se entromete demasiado para acceder a la segunda fila y la caída del techo es pronunciada, lo que te obliga a agacharte más de lo normal para no darte un porrascazo. Una vez dentro, la sensación cambia para bien: con mis 1,85 metros de altura no doy en el techo y la cota par las rodillas en buena.

Eso sí, la plaza central es bastante más incómoda, algo común entre todos sus rivales, con un túnel central voluminoso, una butaca peor perfilada para la espalda y poco sitio para los pies. Eso sí, tiene salidas de aire específicas para esta fila trasera, cosa que no pueden decir todos sus oponentes.

¿Y el maletero? Es discreto, pero funcional: 430 litros son los que caben en una zona de carga bien aprovechada, con superficies regulares y una calidad de acabado suficiente. Eso sí, alguno de sus competidores le supera.

En marcha, las suspensiones trabajan bien y dotan al pequeño SUV de Mazda de una conducción ágil, pero siempre cómoda y fluida. Con nuestro presupuesto puedes optar al completo acabado Exclusive-Line, muy nutrido en cuanto asistentes, tanto para la seguridad como para el confort.

Dentro de la gama del CX-30, el acabado Exclusive-Line es uno de los más completos: alerta de colisión con aviso y freno, asistente de cambio involuntario de carril, control de ángulo muerto, detector de fatiga, cámara de visión trasera, detector de tráfico trasero, Head-up Display, acceso sin llave, Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, navegador, pantalla táctil de 10,25″, reconocimiento de voz…

Precio: 30.190 euros

Nissan Leaf 40 kWh Acenta: tu primer eléctrico

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Con un presupuesto de 30.000 euros y tal y como está de cara la tecnología eléctrica actualmente, te podrás imaginar que sólo podemos optar al acabado más sencillo, el motor menos potente y la batería más modesta del Nissan Leaf.

De todas formas, no tires la toalla, porque eso no significa que no vayas a tener en tu garaje un coche que, para un uso prioritariamente de ciudad, te pueda dar un resultado más que satisfactorio (siempre que cuentes con un punto de carga en casa).

En el habitáculo, todo está presentado con sencillez y buena factura, aunque sin alardes. Acostumbrados como estamos últimamente a las superficies táctiles, en el Leaf brillan por su ausencia. En cuanto a amplitud, cara y cruz: delante no tendrás queja, con una suficiente altura para la cabeza, buena anchura y unos asientos de calidad con un buen mullido.

Cuando pasas atrás, la cosa cambia ligeramente, con un túnel central voluminoso (muchos rivales aquí ofrecen un suelo plano más cómodo), ausencia de salidas de aire específicas para esta fila y unas cotas más estrechas, tanto para la cabeza como para los hombros.

En cuanto al maletero, sus 394 litros te darán para unas tres maletas de cabina, pero tendrás que lidiar con una zona de carga que no es precisamente regular en sus formas.

El motor de 150 CV se muestra agradable y silencioso, y el chasis brilla más por su comodidad que por sus dinamismo (no invita a conducir ágil). Eso sí, permite adelantamientos o incorporaciones con rapidez, gracias a su buena respuesta. Su talón de Aquiles es la autonomía (284 kilómetros), condicionada por una batería (existe otra de 62 kWh, desde 35.200 euros).

Estamos ante la versión de acceso a la gama Leaf (Acenta), pero aún así no le faltan elementos tan interesantes como el asistente de arranque en pendientes, el control de velocidad adaptativo, la cámara de visión trasera, el reconocimiento de señales de tráfico, Android Auto y Apple CarPlay, la pantalla central de 8 pulgadas, el navegador NissanConnect o el acceso sin llave.

Precio: 29.451 euros

Seat León 1.5 TSI 130 FR: una apuesta sólida

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Entre tanto SUV se agradece un poco de aire fresco, y ese viene de la mano de Seat con su gran bestseller, el León. No te vamos a descubrir nada si te decimos que es un compacto que brilla por su buena relación precio/producto, aunque no es menos cierto que las tarifas de la marca española también se han elevado bastante en los últimos tiempos.

Con 30.000 euros en el bolsillo puedes optar por el motor 1.5 TSI de 130 CV y acabado FR que si por algo destaca es por su planteamiento algo más dinámico (monta de serie la suspensión deportiva). De hecho, el Seat León es una de las referencias del segmento de los compactos por su excelente dinamismo.

Te puede convencer más o menos la estética, pero de lo que no hay duda es de lo bien que se comporta. Es un coche con una increíble naturalidad y neutralidad de reacciones y más con esta motorización con la que puedes ir relativamente alegre, ya que su chasis puede asumir perfectamente la potencia.

Por dentro, el compacto español tiene un puesto de conducción envolvente, con todos los mandos bien integrados, aunque nos gustaría que optaran por mandos físicos reales para el climatizador (y no por superficies táctiles). La calidad de acabados es buena y el agrado de uso, insistimos, realmente satisfactorio.

En cuanto a habitabilidad, el punto fuerte del León es que tiene más altura libre al techo en ambas filas que la mayor parte de sus competidores (por contra es algo más estrecho). Los asientos delanteros en este acabado FR son muy buenos y sujetan perfectamente la espalda.

Y si hablamos de maletero, cumple, sin más, con sus 380 litros que le dejan en la media del segmento (la zona de carga deja a la vista los pasos de rueda). Un buen detalle a tener en cuenta: opcionalmente puede tener un doble fondo que se puede colocar a dos alturas además de una toma de 230 voltios.

Con el motor de gasolina de 130 CV y por 30.000 euros, puedes optar al acabado FR, que no está mal dotado, aunque hay elementos básicos a los que se les delega a la lista de opciones. De serie ofrece el asistente de distancia de seguridad Front Assist, control de crucero, control de presión en neumáticos, faros EcoLED, suspensión deportiva, climatizador de tres zonas…

Precio: 29.450 euros

Skoda Octavia 1.0 TSI mHEV DSG: de los mejores ruteros

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En esta selección de coches más interesantes por 30.000 euros no podía faltar este Skoda Octavia. Es cierto que por ese presupuesto no podemos optar a gran cosa y nos tenemos que conformar con la versión de acceso a la gama, que está representada por el motor de tres cilindros turbo de un litro y 110 CV que viene acompañado del eficaz cambio DSG de doble embrague y siete relaciones.

Como te estarás imaginando, el acabado que nos acompaña es también el más modesto, llamado Ambition Plus, que deja en el apartado de opciones un buen puñado de elementos. Sea como fuere, si te estás preguntando si un bloque de sólo tres cilindros puede mover a un Octavia de 4,7 metros de largo con suficiencia, la respuesta es tajante: sí.

Obviamente no te esperes un tiro y mucho menos adelantamientos fulgurantes, pero con la debida paciencia y el buen hacer del cambio automático DSG de serie (siempre acierta con la mejor marcha), esta berlina de cinco puertas se convierte en un rutero de tomo y lomo.

Sobre todo porque, a esa ausencia de ambiciones dinámicas del bloque de gasolina, responde con un consumo muy contenido gracias al sistema de hibridación ligera de 48 voltios que incorpora. Eso le permite rozar los 5,0 litros y ganarse la etiqueta ECO de la DGT.

Por lo demás, no defrauda en su interior. El puesto de conducción está muy bien concebido, con mucho orden y una buena  claridad de ideas a la hora de distribuir los mandos.

No le falta calidad ni tecnología (instrumentación digital y pantalla de infoentretenimiento de 10 pulgadas), pero sobre todo mucha amplitud y sensación de desahogo (mejor en la fila delantera que en la trasera, donde en anchura y altura podría mejorar un pelín). ¿Y en maletero? Una exhibición, con 600 litros en configuración de cinco plazas y formas muy regulares.

La dotación de serie del acabado Ambition Plus está bien nutrida, aunque deja bastantes elementos en la lista de opciones: de fábrica llega con alerta de fatiga, Front Assist, guiado de carril, sensores de aparcamiento, luces de carretera automáticas, climatizador bizona, control por voz, instrumentación digital y sonido con ocho altavoces.

Precio: 31.450 euros

Volkswagen T-Roc 2.0 TDI 115: para los que pisan sobre seguro

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Hasta ahora te hemos mostrado modelos con todo tipo de tecnologías bajo el capó, y aquí repetimos con un diésel, que hace un maridaje perfecto con este Volkswagen T-Roc.

Se trata del 2.0 TDI de 115 CV, que se muestra siempre muy contenido en cuanto a consumos y, aunque tiene unas prestaciones modestas (el 0 a 100 km/h no baja de los 10,5 segundos), siempre está atento a las órdenes de tu pie derecho, con una satisfactoria facilidad para ganar velocidad cuando supera las 1.800 vueltas.

A nivel de chasis es cómodo (va construido sobre la plataforma modular MQB), si bien sabe contener con solvencia los cambios de apoyo. Se siente ágil entre el tráfico urbano, bien aplomado en autopista y con un buen tacto en carreteras secundarias.

Lo que sí que echo en falta son los polivalentes modos de conducción para ajustar la respuesta general (disponible en opción a partir del acabado Life).

En su interior nos encontramos con un habitáculo aparente, si bien abusa un poco de los plásticos duros (los ajustes son muy correctos). A nivel de tecnología no va nada mal dotado (sendos displays de 8 pulgadas para la instrumentación y el equipo multimedia), aunque se echa en falta un mayor despliegue en asistentes a la conducción.

Y en espacio tampoco le puedes poner muchas pegas, con unas buenas plazas traseras en las que cuatro adultos podrán viajar sin problema (cuenta con salidas específicas de aire), sirviéndose para ello de un maletero con una capacidad más que correcta: 445 litros en configuración de cinco plazas, 1.290 con los respaldos abatidos.

El equipamiento asociado a este motor TDI de acceso no está nada mal, aunque se echan en falta ciertos elementos, como el navegador o un mayor número de asistentes. Incluye luces de carretera automáticas, sensores de parking, Front Assist con detección de peatones, faros LED, climatizador bizona, instrumentación digital (8″), dos tomas USB C y llantas de 17 pulgadas.

Precio: 30.055 euros