Este Bugatti 'Transformers' es único en el mundo y está en España

El deportivo francés, merecedor del título al roadster más rápido del mundo con 410 km/h, tiene en esta unidad una decoración de película que se le antojó a ‘Daniel’, su primer propietario..

Si decir Bugatti ya es mencionar a una marca merecedora de estar en el Olimpo del automovilismo (en el que comparte espacio con otros fabricantes), hablar del Veyron Grand Sport Vitesse es ahondar en el lujo y la exclusividad más si cabe.

Solo 92 multimillonarios de todo el mundo recibieron el privilegio de poder comprar una unidad (siempre se descarta a muchísimos candidatos, y no precisamente por problemas de dinero), lo que ya de por sí hizo que el coche aún más deseado.

Monocasco reforzado

Su carrocería era la del Veyron pero con techo abierto, bajo la que se ocultaba un intenso trabajo por parte de los ingenieros de la marca de Molsheim (Francia) para reforzar el chasis monocasco de fibra de carbono y compensar su pérdida de rigidez ante esta nueva configuración.

Y el motor era el conocido W16 con cuádruple turbo, solo que con la potencia elevada en este Grand Vitesse de los 1.000 CV originales hasta los 1.200. Si combinamos ambas características, entendemos que este Veyron Grand Sport Vitesse, que pasaba de 0 a 100 en 2,6 segundos, se convirtiera en 2013 en el roadster más rápido del mundo, con una velocidad máxima de 410 km/h que ‘barría’ por completo los 325 km/h que ostentaba como marca el Bentley GTC Speed.

Transformers: su gran pasión

Hasta aquí, todo es impresionante. Pero uno de los clientes a los que Bugatti concedió el honor de llevarse el coche a casa no se contentó con poder comprarse un Bugatti. Ni con tener el privilegio de que le vendieran esta versión exclusiva. Lo quería más a su estilo, y pidió a la marca francesa que representaran en el coche la gran pasión que él sentía por la saga cinematográfica Transformers.

A un cliente que está esperando que le entreguen el coche para soltar un cheque cercano a los dos millones de euros no se le puede negar una petición semejante, así que idearon una pintura muy especial con la cara representativa de Transformers para el capó, y terminaron de plasmar en aletas y puertas una decoración que representara este universo cinematográfico. Porque, como comprenderás, no le iban a vinilar el coche.

El nombre de Daniel

En su interior también plasmaron la reconocible cara de Transformers, en este caso entre los asientos, y terminaron personalizándolo añadiendo el nombre de Daniel (así se llamaba el comprador del coche, desconocemos su apellido) bordado en los resposacabezas.

El coche fue de los últimos que se fabricó y salió de la factoría en julio 2015. De ahí no fue enviado a España, sino que recaló en Estados Unidos, donde vivía el tal Daniel. Concretamente fue a parar a una localidad de California llamada Los Gatos.

Se cansó muy rápido

Se sabe que su propietario lo exhibió en eventos del automóvil durante aquel año, como el Salón Internacional del Automóvil de San Francisco. Pero demasiado pronto se le desinfló a este Daniel el ‘subidón’ por su nuevo súper deportivo y antes de final de año se lo quitó de encima. Tenía entonces 850 kilómetros y fue a parar a manos de un coleccionista que con mucho gusto le hizo un hueco entre otros Bugatti modernos.

Lo cierto es que su segundo propietario, que hizo retirar el nombre de los reposacabezas, lo ha utilizado mucho más, porque el odómetro marca en la actualidad algo menos de 5.200 kilómetros. Incluso le ha comprado el programa Passport Tranquillité de Bugatti, que incluye servicios de mantenimiento anuales (ruedas nuevas incluidas) hasta diciembre de 2024 y se abona como un servicio anual prepago, entendemos que a un precio nos escandalizaría a quienes tenemos una economía ‘normalita’.

Está en Madrid

Pero ahora el Bugatti Veyron Grand Sport Vitesse ‘Transformers’ más reconocible del mundo vuelve a estar a la venta y curiosamente hemos sabido que se encuentra en Madrid. No haciendo una visita temporal, sino desde hace tiempo y hasta que encuentre un nuevo propietario.

De momento, de su venta se encarga RM Sotheby’s, que no ha comentado nada sobre su posible precio. Y no será por no ‘asustar’, porque en esa misma subasta, que se realizará el 1 de mayo, también pondrá a la venta (entre otros coches) un Ferrari F40 por el que estima un precio de 2,5 millones de euros.

Por ahí podría ir la tarifa de este Bugatti. Y salvo sorpresa mayúscula, lo normal que encuentre su nuevo destino fuera de nuestras fronteras.

Sigue toda la información deportiva en www.marca.com y suscríbete a Orbyt.